viernes, 31 de julio de 2009

"Sólo un perro muerto"


...me lo han dicho y me lo he dicho: "es sólo un perro muerto", y ya ves, tengo el corazón hueco y vacío, los ojos brillantes lloran contra mi voluntad y estoy enferma de ausencia y recuerdos.
Has estado conmigo, presencia estable, tranquila y segura, compañero silencioso, sereno y comprensivo en años de paseos, cocina, jardín, monte...atento a mi llegada, sonreías con tus saltos y alegría; ahora, viejo, con el repiqueteo de tu rabo.
Pasamos juntos mis penas, cercano y discreto, sin dejarme en mis duelos ni huir de mi tristeza que hacías nuestra.
Marcaste los lugares, y es tuyo el monte: alegre y joven me llevabas y traías, respirábamos el aire limpio , veía amanecer, salir el sol tras las colinas; el jardín, me llevabas sin agobio a la hamaca, y allí, mi mano en tu lomo grande, los momentos de paz sin exigencia, de placer de vivir y sentir sin mas objeto o tiempo...cocinar, entrar, salir...todo lo tienes marcado y en todo me faltas.
Estoy enferma de ausencia y recuerdos...
¡Tus últimas horas¡ la inquietud que no te conocía ni sabía aplacar, tu mirada suplicante, tu cansancio terrible....y yo, inútil, tocándote, hablándote, intentando sujetarte con mis manos; y tu, iniciando algún gesto agradecido, levantando levemente tu pata, acercándote aún mas a mis manos ya inútiles...
Y fuiste el mismo hasta el final; esperaste a Javier-tu amigo del alma- le miraste con ternura y dijiste adiós sin quejas, adiós anunciado.
Juguete primero, perrito de peluche, y, poco a poco: tú. Con tu espacio ganado. Después y siempre tú, con tu nombre, sin tu especie. Amigo simple, amigo ,contento de ser mi perro, y yo, contenta de ser tu persona...no nos planteamos más.
Y mira, se acabó...si hay un cielo para todos, prométeme esperarme allí, tratarme igual, quererme igual que yo te prometo estar allí, quererte igual, tratarte igual.
...tu sólo eras un perro; yo sólo una persona que te quiso, muy triste.
Te guardo en mi corazón, en el rincón de la ternura gratuita, junto con los regalos que recibo, a veces ignorados por sus dueños, y la que me queda dentro porque no se explicarla. Ahí estarás, conmigo, con mi mano en tu lomo, hecho un ovillo, para siempre.

Han pasado meses de la muerte de mi perro y sigo notando su ausencia y vacío, sigo llorándolo cuando nadie me ve .

domingo, 26 de julio de 2009

Niños violadores

Se están dando casos y se darán mas.
Hemos educado niños-reyezuelos que desconocen palabras como consecuencia, temor y castigo. Palabras mal vistas por nuestra sociedad "nueva rica " en democracia y valores, que los magnifica en altas loas convirtiéndolas en palabras huecas y vacías.
Si; cada hecho tiene su consecuencia, si corro en el coche, puedo hacer daño, hacérmelo o ser multada; si robo, me encarcelan; si no trabajo, no tengo dinero...
Pero se da el caso de que hay mucho niño con INMUNIDAD INFANTIL ADQUIRIDA POR RANGO.
Los niños , desde pequeños aprenden a distinguir el bien del mal, aprenden a respetar los juguetes del otro, las normas del football, las del colegio, las de la calle...¡si las hay¡.
Vamos a poner que el niño suspende: no importa ¡pasa de curso¡, pongamos que insulta a sus compañeros: no importa. ¡son cosas de niños¡
Pongamos que insulta a sus compañeros o a un profesor: no importa, ¡tenía un mal día¡
Pongamos que el profesor en cuestión le castiga: no importa, sus padres pondrán las cosas en su sitio (es inocente y el malo es el profesor)
Pongamos que un policía le separa de un peligro cogiéndolo de un brazo: podrá ser sancionado(el agente)
Pongamos que su madre le da un cachete: será apartada y encarcelada.
Pongamos que el médico no le recibe nada mas llegar: será voceado o golpeado.
Pongamos que el niño viola: pues volverá a su instituto donde será aclamado como héroe -malote y, por supuesto,¡a su casa¡
Mientras, la víctima cambiará de colegio por no verlo y sus padres temerán -en este reino del revés- a sus vecinos y compañeros por haber denunciado.
Doblemente víctimas ellas y sus familias y sin esperanza de justicia.

viernes, 24 de julio de 2009

High-line, su venus y el día de la patria.


Tiene gracia e ingenio el diseño del jardín de la high-line y mucha gente. Siempre mucha gente.
Temo que estén ocupadas las grandes hamacas que lo bordean -se he apoderado de mí el bendito demonio de la siesta-y voy mirando a sus ocupantes por adivinar sus intenciones y poder tirarme en plancha a la primera insinuación de alzada.
De pronto, veo una ocupada por una venus de Botero con la mirada perdida y lejana ,derramada en su blandura, nada estructurada;las carnes abundantes y sensuales bosando los límites, la postura de una Hurí que sin necesidad de cojines o colchones, ella misma se posa y acomoda sobre la teka con sus enormes pantalones rojos, indolente, en mudo desafio a las entregadas deportistas que corretean a un lado y otro sudorosas.
Muestra calma y gozo....mmm quizá levantada, su enorme vibrato carnal sea excesivo; tumbada es el equilibrio barroco de las formas. Perfección de enlaces curvilíneos sin rupturas, cambios de plano sutiles, casi mágicos. Monumental.
Me freno ya con la mano en la cámara y, sospechando que pueda entenderse mas como una ofensa que como un halago opto por grabarla en mi retina.
Otra es ocupada por una familia india con niños que suben y bajan sin parar, disfrazadas las hembritas con tutús y rasos de poliester, brillantes y decorados; los varoncitos. con sus corbatitas y camisas "de vestir"...Hay japonesas de Manga, americanos de Chicago-digo yo- paseantes de perros nativos, sillas de ruedas de última tecnología...
La suerte nos es propicia, y un poco mareadas de luz (el sol sale y se quita) de espacios, de movimiento de gentes...sesteamos un poco.
Me pregunto qué tamaño será el de la venus cuando compruebo que mi guía y yo cabemos y nos sobra espacio en la hamaca conseguida.
La tarde la ocupamos en el Soho, un Soho abandonado y desierto porque es el día de la patria, fiesta étnica en que nativos y visitantes se entregan al placer y vorágine de los fuegos artificiales y las tracas.
A mi ésto no me sorprende porque lo he conocido así, pero mi guía me hace observar lo especial de la vista. Para obedecer y observar, me siento en un escalón con un cigarro y una botella de agua. Me veo el tobillo hinchado.
Los fuegos los veré en la minitelevisión de la cocina y oiré las tracas en sonido ambiental; las lóas a la patria las escucharé en mi radio, de boca de Ricoperez, de Ricoperez.com y sus tertulianos.
Creo que las oigo todas en cubano ,mezcladas con sus consejos médicos, que tanto me gustan y amedrentan.

Camino de high-line vía Pastis y mercadito





Vamos de brunch a Pastis. Pastis está de moda y yo me dejo guiar.
Andando desde un metro-no me llevan en línea recta-aparece una zona encantadora y calmada ,con sus casitas bajas bien cuidadas,sus calles no excesivas, sus mercaditos ecológicos, flores en cubos de lata que parecen silvestres y no reconozco,señoras de todas las edades vestidas con nobles tejidos-nada sintético por supuesto-paseándose en el multicolor escenario(...me inquieta la duda de que lo sea)y caballeros con ramos para las que no están allí y que sin duda les esperarán con la mesa puesta sobre mantel de lino , vajilla completa y cubertería de plata.
Me voy metiendo en el papel .Mi guía y yo no desentonamos (ay¡ siempre la cámara que nos delata) y por un momento la película me seduce; yo no tengo una de esas casas, si compro las flores, las tendré que ir paseando todo el día y parecen extremadamente frágiles.
Las fotografío y envidio a partes iguales.
Mi guía no tiene dificultades en sacarme de éste entorno tan propio porque el brunch es tentación mayor.
Pastis está de moda, ya lo he dicho así que: lleno.
Pastis está en otra zona,en una especie de melé-cáos de naves industriales desvencijadas y modernidad confusas.
En realidad no es mas que un bar a la francesa con sus mesitas en el exterior, en que toda la gente tiene buen aire y las raciones son de camionero.
Me desalienta el tamaño de los platos. El revuelto debe ser de seis huevos, la taza de café es un cubo de playa...para mi que ésta gente debiera estar mas gorda.
Con el ánimo reconfortado y el estómago a tope, nos dirigimos al jardín de la High-line

jueves, 23 de julio de 2009

Hace terral y gracias




Hace tanto calor
que hoy,de mo
mento, sólo voy
a dar las gracias
a "mis amables" lectores y enviarles flores de cultivo propio,
dejando para mejor ocasión el
episodio de la hermosa e indolente gorda de High-line y mi curiosidad sobre cómo debe ser un blog

miércoles, 22 de julio de 2009

Regateen

Llevo en mi retina aún al excombatiente del Viet-nam o del Golfo pasando como una exhalación en su camilla y me contraría que mi perplejidad y su rapidez no me hallan permitido fotografiarlo; como pienso que mis lectores tendrán dificultades para creerlo, opto por contárselo a mi hermana M-de gran y conocido juicio- a modo de prueba y ella se limita a preguntarme a dónde lo llevaban; no le sorprende demasiado que fuese conductor solitario de su monoplaza ,sino mas bien la dirección que llevaba, así que opto por contarlo.¿puede ser que condujese boca abajo porque si no no se pueden mover las ruedas y no por un tiro en el culo?
Nos sueltan en Canal st. con varias recomendaciones:
ahí está Chinna, regateen, compren, encontrarán falsificaciones buenas...
Nos dirigimos, obedientes, a una calle atiborrada de orientales y turistas. . Se nota la excitación y adrenalina en el ambiente. Todos cazando algo. A mi me caza un Chino, porque en mi inocencia, y ante su pregunta de si quiero comprar un bolso, le digo que no, que busco una mochila.
Prepara éste individuo un dispositivo inquietante: mira el reloj (ésto tiene mucho efecto en las cuestiones de suspense), nos pasa de chino a china, de esquina a esquina, de calle principal a secundaria, con paradas, susurros , walkie-tal. ...
Si no fuese cutrecillo todo y ninguno buen mozo, creería que estamos en una película de James Bond.
Acabamos metiéndonos a la carrera en un monovolumen - ¡ay insensatas¡-de cristales tintados donde nos amontonamos en cuclillas, junto a una joven misteriosa y montañas de bolsos.
La joven misteriosa suelta una retahíla de nombres(se con posterioridad que se trata de "famosas marcas")y yo insisto, con gestos y explicaciones, en que lo que quiero es una mochila.
Parece ser que mi comportamiento no responde al de" la asidua a monovolumen",que suele saber marca, modelo y estrellas que lo usan.
La joven se muestra disgustada y nos invita a marcharnos cosa que hacemos con agrado.
Sabiendo que entre mis obligaciones está comprar algo en N.Y. entro en una tienda ,mercadeo y compro al boleo un reloj imposible. Si, realmente imposible.
Seguimos un rato por éste reino del todo a cien, entre bazares, joyerías que parecen bazares, templos paganos en rojo y dorado- que lo mismo son restaurantes- bancos y gentes de todas partes comprando satisfechas, con su cámara, zapatos deportivos y aire sudoroso.
Saturada de información, imágenes, paseos, chinos...llego a casa con la esperanza inútil del silencio.
Soy una turista carente de entrega y convicción.

viernes, 17 de julio de 2009

CONTRASTES










Ayer contratamos un tour por N.Y.de fácil nombre y ejecución, ya que si algo es sabido de ésta ciudad, es eso.




Por principio, mi individualismo feroz me hace aterrorizarme ante la idéa de corretear tras un pastor a modo de parte de un rebaño obediente; sin embargo, y sin que sirva de precedente, éste me va a gustar.
Luz, nuestra pastora experimentada, exagerada y expresiva, con un verbo incomparable y chistes ad hoc de gran efecto, tiene mucho que ver.
Es como una animadora sociocultural que, rozando a veces la vulgaridad, jamás la alcanza. Bien es cierto que no respeta jamás lo politicamente correcto -Dios la bendiga- y que le ayuda su castellano lleno de expresiones arcaicas que pienso memorizar
Nos va recogiendo y cargando mientras se disculpa por su retraso, y, comienza a hacernos ver "la variopinta de las gentes "de algunas zonas, "lo bién portadas" de otras, nos habla de los maniquebrados haciendo alusión a las primeras fiestas del orgullo gay, o de los que están faltos de cinco pal peso..
Mientras, el autobús va recorriendo kilómetros (aquí son millas y mas largas) y no se bien -ni
mal- geográficamenta dónde estamos
Cuándo se trata de barrios, está claro
¿Que está lleno de negros, zapatillas colgadas sobre las calles a modo de reclamo de droga, grupos sentados a las puertas ,pinturas alusivas a mártires-camellos y alguién nos enseña el culo? pués eso, el Bronx. De aquí salimos "a calzas prietas".
(En la parte superior pueden ver un ejemploen: al niño narco-martir, mural de técnica mixta de pintor local
¿Que todo es gris, los varones llevan dos tirabuzones a modo de orejillas alargadas de spaniel, las damas pelucas, las niñas leotardos y mangas largas en pleno verano? pués en el barrio judio, el de las seiscientastrece normas (dice Luz que frente a las diéz nuestras), el que sabe comprar y hacerse rico -aunque no debe hacer alardes- ,el que utiliza sus propios buses para ahorrar y no debe practicar sexo consintiendo en el placer (vamos, que deben concentrarse en el deber) y vestidos con un hábito que impida el contacto personal, limitándolo al de la estricta "introducción" con fines absolutamente útiles: hacer niños, porque -sigo citando- ellos, ni los gases (pedos)tiran , todo lo aprovechan; asegura que le han contado de chisme, que algunos de estos varones, con cuidado de no procrear, si que se da su cuartito de chicharrón con alguna jovencita caribeña y empleada.
(Adjunto imágenes de niño de la judería en su balcón de N.Y. y niños divirtiéndose en día de fiesta
Voy haciendo fotos un poco avergonzada, siento que en éste gran zoo, los animales no están conformes con que se les exhiba, pero mi cámara es nueva, voy en lo alto de un autobús y pertenezco a un rebaño. Todo tiende a disculparme.
Mientras,Luz nos aconseja que sigamos a las damas si las vemos en las rebajas, que ellas saben comprar y nos guiarán; no quitándole la razón y aún reconociendo la atemporalidad severa de antigua teresiana que lucen, decido no hacerlo
De la parte Hispana, me quedo con el pantagruélico desayuno y las ganas de entrar en la tienda que tiene remedios para el mal de amores y bichoseco -que encuentro de tánta confianza como al Dr. Ricoperez, de Ricoperez.com, que te quita el insomnio, la caida del pelo o la dificultad de orinar en cualquier parte de América (en Alaska cobran portes) y que ¡mira si serán buenas las fórmulas de su padre que desde hace venticinco años se vienen manteniendo¡
Éste Ricoperez tiene un programa de radio dónde recibe llamadas, y yo, anoche , estuve tentada ,pero cuándo le oí decir a una pobre señora que había confesado su peso y estatura -en mala hora- y que no se traducir por lo de las medidas extrañas que usan, que le tendrían que cortar primero los deditos de los piés (ay, si señoraaa¡¡¡), luego los piés (ay ,pobre señoraaa¡¡) luego los tobillos... me vine abajo.
No créo ser gorda ni diabética, pero, Ricoperez el sanador-doctor, carece de la ambigüedad que yo requiero.
Bueno, bién pensado, yo hubiese entrado con gusto en lo del bichoseco y mal de amores; a mi me duele el tobillo y tengo insomnio que seguro son mas fáciles de tratar.
Es lo que tiene el grupo, que te domina y no te permite tirar pa tu querencia.
También, y retomando, puedo reconocer la zona que hicieron para los excombatientes del Viet-Nam -a veces dudo un poco de Luz-;está en una isla llena de paz dónde no hay gente ni tiendas ni bares ni coches...o se han muerto todos, o esto es una maqueta....pasa repentinamente una camilla manejada a gran velocidad por un señor tumbado bocabajo -se ve que le dieron en el culo-mmm...
Reconozco el gran cementerio, el jardín dónde hay un mundo de hierro que por afirmarme no fotografio, el campo de jugar al base-b y otro cercano que lo sustituye(o los hacen por duplicado), se algo de botaderos de basura, de los diferentes impuestos por zonas, de la planta de calefacción de la Isla...

Por supuesto, todo ésto está en N.Y. y como gracias a Dios todos lo conocéis, no debo guiaros y sabréis de qué os hablo.




miércoles, 15 de julio de 2009

Crysler y Sylvia

Bajo en el sitio correcto y me encuentro ante un hormiguero gigantesco con caminos en todas direcciones y gente a la carrera; creo que van sin ton ni son. Ésto no me gusta .¡Quién sale de aquí¡. Yo. Por pies. Descubro con satisfacción que andando errática, como ellos,lo consigues; a pesar de que diluvia, noto el alivio de la calle, del cielo abierto (no mucho porque los edificios no respetan mas que una franja).
Llamo a mi guía, ¡qué mona mi guía¡ y resulta que estoy al pié del Crysler(mi difícil objetivo); viene a buscarme mientras observo con satisfacción los suelos, paredes y techos de piedras semipreciosas que yo encuentro preciosas;los trajeados porteros y el superintendente(lo menos) alto y señorial y, bajo su mirada, paso a la zona que los turistas tienen prohibida.
Siguiendo con mi torpeza proverbial, la tarjetita-permiso que porto, no obedece, pero consigo entrar.Ah, ¡los ascensores¡ decó decó en su perfección extrema, palmeras marqueteadas de maderas nobles, en su punto de belleza exacta , de ligera severidad cromática, con el tiempo a su favor... y, para mi disgusto, subimos decenas de pisos en un segundo.
Me quedaría aquí, abriendo y cerrando puertas -todos son distintos- pero no me dejan (mi guía se sigue manifestando autoritaria y ordenada), así que de nuevo estoy ante un espectáculo difícil de asimilar: todo parece de mentira o de película, las minúsculas personas, los cochecitos- como de maqueta- moviéndose, las callecitas...todo a vista de pájaro revuelve mis mas bajos instintos, tiraría con gusto una maceta por ver los efectos. No hay macetas y ,sometida al planning-insisto en que yo me quedaría subiendo y bajando en los ascensores-corro hacia el Lincoln, al ballet.
Llegamos a la gran explanada bajo un diluvio de agua y granizo; vamos derrapando por la enorme superficie y termino salvándome de la segura caída quitándome los zapatos. Mi inflexible guía no me deja retroceder ni guarecerme.Dios se vengará mas tarde tiñéndole los pies de rojo-sandalia bastante imperecedero.
Diluvia, graniza; da igual, al entrar :zarpazo de frío.
Sitio estupendo del que nos levantamos una y otra vez para dejar paso a lisiados y tullidos venerables y pelmas (ésta plana parece la de trauma de un geriátrico acomodado). A sus "excuseme" y sonrisa amable respondo con un gruñido fácil de comprender en cualquier idioma y mas si se acompaña de gesto harto.
Mi comportamiento es corregido varias veces por mi guía que es mas joven y amable y quizá tiene menos hambre.
Se llena completamente -como todo- , sólo que aquí no hay oscuros ni chinos-chinos (medio oriental , alguno) y comienza el desconcertarte espectáculo.
Yo iba al ballet, y si, hay ballet,pero la confusión sobre su definición es completa: los dioses se mezclan con los humanos (siempre lo han hecho y lo acepto), los humanos son estilizacines infantiles o para comic de campesinos rococó, de jeques-marahás, hay unos ratoncillos encantadores que gozan del favor del público y muchas apoteosis.
Ella, magnífica,en su seguridad, arranca grandes aplausos del público cada vez que se le pone .Hace mohines y desplantes, y, ala, retumbando el Lincoln. Baila exquisitamente,pero en ocasiones parece Norma Duval bajando la escalera con lo de "agradecidos...o quizá perteneciente a un musical o a un Booywood americano.
En esas apoteosis repetidas, todo el cuerpo de baile (incontables)repite un número, cada cuál con su disfraz: dioses, campesinos, ratones, bailarinas clásicas, eunucos...a mi me crean confusión, al público general, admiración y entusiasmo.
Miro la orquesta para distraerme pero...¿qué hacen los graves a la derecha?...¿será zurdo el director?
En medio del estupor sigo teniendo hambre, así que en el descanso,salimos para intentar comer algo grasiento que nos alivie el frío- para éste momento ya llevamos puesto encima todo lo que encontramos, incluido un vestidito a modo de bufanda, un jersey con capucha, mi tobillera y ...¡oh¡ ellas, las gacelas Central Park- intuyo- diosas encaramadas sobre sus enormes tacones de cristal en sandalias imposibles,suspendidas en el aire en sus vestidos de seda escuetos, uñas, peinado, maquillaje...todo perfecto; y yo con estos pelos.... mmm... ¡ no¡, sus vestidos pretenden perforar con sus grandes pechos el tejido: ¡tienen frío¡ ¡no son diosas¡
Tarde, cansada, perpleja mojada: así llego a casa.

lunes, 13 de julio de 2009

El metro hasta la 116

Vuelvo a casa sin mayores dificultades y a pesar de ver varias llamadas perdidas, la cama me tira y hago caso omiso; pero suena para quedar a la tarde. Quedamos, no sin antes recibir instrucciones concretas que además me han sido dadas por escrito. Cuelgo y recibo otra llamada diciéndome lo que me ha costado...¿pero.qué es esto?...estoy segura de que no he llamado yo. Recapacito...estoy segura, no he llamado; por si acaso, lo mejor será descansar.
Descansar no es cosa fácil en N.Y., la ciudad suena de fondo como un motor constante, y, sobre él, las sirenas se acompañan de un rugido intermitente, corto y potente. Hay luz y no persianas. Creo que esta gente es estoica, los niños no lloran, las mujeres se alzan en tacones impensables, los varones van trajeados y etiquetados y, si es la hora de comer, llevan bolsitas de papel con su comida...
Descanso lo que puedo y luego concentro mi voluntad en arreglarme -no soy neoyorkina y ya he hecho muchas cosas a la mañana- pero tenemos ballet. Elijo en mi desordenada maleta algo que considero neutro(lo mismo pa un roto que pa un descosido)y guardo en mi mochila(mas pa un roto)los apuntes que esmeradamente me ha hecho la niña.
Llevo andando largo rato y cómo no veo nada parecido a la entrada de un metro digna, pregunto, estoy justo enfrente, entro, miro con atención lo de up y down y bajo al andén correcto.
La tarjeta no entra, bueno, si entra pero no dice go, así que un amable oscuro de aspecto peligroso me ayuda.
El paso de los 45º a los 18º me obliga a dedicar toda mi atención a equilibrarme en mis 36º, y para ello tomo asiento, asiento lejano al pequeño luminoso que indica dónde estamos y hacia dónde nos dirigimos.
Estoy cómoda sentada y carezco de voluntad suficiente para levantarme. Ellos, de todas razas y mixturas, tamaños y decoraciones, parecen dispuestos a tirarse a mi asiento nada mas inicie la elevación. Van pasando las estaciones, se van bajando los mas claros(soy clara), luego los medianos, luego los mixtos y, poco a poco, sólo quedan oscuros.
Saco fuerzas de flaqueza -ya estoy a gusto a los 18º- y de la inquietante realidad de estar en la 116 cuando voy a la 42 y he debido salir de la 4.
No tengo esperanza de que ésto haga un extraño quiebro porque la realidad se impone, y bajo, y pregunto a una oscura de mandíbula prominente que se atrinchera en una caseta acristalada y me contesta ayudada por algún amplificador de feria; atronadora, bestial-
Me molestan los tímpanos y su expresión animal.Yo no entiendo nada, pero los demás ocupantes del andén, quizá acostumbrados,si.
Entonces, un grupito encabezado por una cubana madura de pelo gris, moñete y digno aspecto, y compuesto por sus hijas y yerno -deduzco yo- se acercan cariñosas, con su castellano amoroso y muestran su asombro por mi voluntad de ir a la 42 y estar en la 116: chicaa, sales, y cruzas- canturréan- y luego down, y te bajas pues en la Central ,chicaa, eso está fácil...
Salgo, cruzo y tiko...¡sorpresa¡ otra vez el grupo liderado por la digna cubana: ¡qué hiciste, otra vez acá,qué tan caro te va a ser, tienes que cruzar..¡ y entre ellos: acompáñala- no parecen tener prisa- y me acompañan a modo de escolta, a la derecha, abajo...bueno: ¡gracias de nuevo¡ muy amables...
Miro y si, pone down, voy a entrar y, ¡de nuevo la cubana¡ véngase, monte -veo claro que van desconfiando de mi capacidad- éste va mas rápido y nosotros entramos en él...
Me sumo al grupo, les digo lo obvio, que no entiendo de metros, y lo no tan obvio, que no soy tonta- de reojillo observo al varón del grupo reír con cortés disimulo, incrédulo.
Dado que nunca he tenido problemas con eso rectifico: bueno, la cosa es que no soy tan tonta como parezco.
Se deben bajar antes, y lo hacen dándome su bendición -seguro que necesaria- e insistiéndome :¡tu vas mirando y te bajas en la 42, estate atenta..¡
Me siento reconfortada por la bendición y la temperatura(de nuevo 18º) y saco el plano por primera vez, y, un chino -si que debo parecer mas tonta de lo que soy - se interesa por" mi problema"(no se si piensa que soy borde, autista o extranjera). Mira que son una raza silenciosa y críptica, pero se interesa.
A pesar de que creo saber dónde voy, y para no decepcionarle, le cuento mi problema (todo ésto en mi correcto inglés)y entonces, el que pone cara de poker y profiere sonidos inconexos es él.
Cuando le nombro el edificio Crysler- lo pronuncio de cuatro fomas diferentes- y no lo conoce, siento la superioridad y el triunfo en mi ánimo.
Estoy a punto de preguntarle si él tiene un problema. Chino no se, inglés, o él o yo tampoco. Mejor me callo...y pierdo la mirada en ese punto imaginario que recoge las de todos los pasajeros que no tienen un libro para disimular(nadie pasa páginas) y que evita que nos la cruzemos
Con mis gafas oscuras y de reojillo, veo al chino con la cara aviesa y enfadada, quizá simplemente estreñido, pero como ya he dicho, no puedo dar diagnóstico porque son crípticos.

sábado, 11 de julio de 2009

Ésto sigue

Se hace pronto de día.La niña trabaja y salgo sóla a caminar. Barrio Chino, jardincito tentador lleno de venerables(?) en diversas actitudes;una anciana da patadas y brazadas al aire como si quisiera desprenderse de sus extremidades: se esfuerza sin conseguirlo. Otros juegan a las damas con sus caras perversas o se sientan en paralelo, a distancia conveniente, y dan esos grititos guturales y cortantes que sin duda deben ser un método básico de comunicación. Su inexpresividad gestual- exceptuando su aviesa mirada oblícua-me hace pensar en los marrajos...de todas formas, y no sabiendo dónde estoy, me siento en un banco junto a cuatro ancianas-no pierden la mirada aviesa con la edad-e intento preguntarles.
Tres, o son sordas o se lo hacen o son poseedoras del misterio oriental. Ni siquiera me miran; la cuarta-quizá tarada- me asegura que habla inglés, pero no sólo no responde a mi pregunta(cómo se llama ésta plaza)sino que continúa hablando-gritos culturales-con el grupo de las "misteriosas"ignorándome alevosamente.
Bueno, continúo sacando conclusiones absorta en mi guía y paséo hasta la zona de los juzgados, la Corte megaloneoclásica decimonónica, abogados, guardas que saludan sin ton ni son(a mi), otra vez chinos (éstos con ramos de novia de plástico y cámaras de fotos),gente endomingada y parquecito con bancos:me siento.Miro a mis vecinos dedicarse al trabajo de estar y me sumo.La temperatura es agradable, el sitio verde...el ruido de aire acondicionado que se suspende por toda la ciudad me aleja del paraiso.
Y continúo, continúo dispuesta a no pregunta y miro concienzudamente mi guía, concentrada ,la giro, con el ceño fruncido por la concentración y...¡fíjate¡ hombre de diseño y mediana edad, casi seguro arquitecto,se ofrece a ayudarme.Sorpresa: les habrá llegado aquí lo de que la arruga es bella? será que esta luz me favorece? estaré refloreciendo?
Con desconocidos no hablo, así que le aseguro que no necesito ayuda .Automáticamente me arrepiento, mas, cuando me entero-por otro voluntario de menos diseño- que voy en dirección contraria.
La calle está llena de almacenes de cocina, ¡cómo no¡, entro y me provocan desde los estantes multitud de objetos de incierta utilidad. Dada la perfección de mi inglés sólo consigo entenderme a duras penas con un vendedor chino

viernes, 10 de julio de 2009

NUEVA YORK Y YO

Miércoles
viaje.Horas y horas de ruido y asiento aéreo (y comidas),pero llego .La maleta,grande y rota se muestra inmanejable, el oscuro del taxi -negro esta mal visto, y de color ,puede ser azúl -que no entiende mi "perfecto inglés",muestra un inquietante desconocimiento de las señas a que me dirijo y, anda y anda entre atascos y túneles -si fuese mocita vistosa creería que no me lleva a donde voy, que voy a ser" tratada como blanca", mi realismo nada mágico me da para pensar sólo en la remota posibilidad de un atraco.
Pienso también tomar su número de licencia; la indolencia y el zumbido del avión aún persisten en mis oidos y me convencen de que sólo Dios sabe nuestros designios.
Amable y curiosa intento entablar conversación con Mohamed (o así), y me ignora. Asustada por sus modos, pero asada, enciendo sigilosa el aire acondicionado mirándole a la nuca y a Dios gracias, no reacciona.
Vehículo decrépito, voy hundida en el culo de miles de pasajeros con un gran negro que sólo abandona su autismo cuando me muestro paraca en el billete .Ahora soy yo la autista .¡Ah Mohamed¡ haber sido majo antes y además, el papelito dice 45 y algo del peaje y algo de propina. Yo no he visto lo del peaje (y no estoy convencida). tu no has hablado, así que ¡hala¡ baja la maleta y no te digo que la has roto tu de milagro.
La nena está en casa y me ordena superar el jet-lag, que es algo parecido al insomnio, impidiéndome dormir .El método lo encuentro radical, pero estoy en su casa, carente de voluntad y ella se muestra estricta. Me doy lástima: miro mis piés que son tal que manitas de cerdo: los tengo mas bién pequeños, los tobillos hinchados y mis sandalias topolinos. Sólo requerirían de un poquito de pintura rosada para completar la imágen ; bebida no estoy mas enajenada (sensu estricto), y créo que salimos. Me ordena mirar al cielo y ver el color del atardecer y mi mirada sólo llega a las fachadas, todas quebradas por escaleras volantes. Mañana veremos.

miércoles, 8 de julio de 2009

Amabilidad neoyorkina

Por un rato creí que era mi encanto nuevo o renovado el que provocaba que mi mirada distraida
y miope acercase irremediablemente a varones de diversa edad y condición a acercarse a mi ,la dura realidad es que los ciudadanos aquí son de una dasmensurada cortesía que raya en el empalago.Siempre no estoy perdida,a veces quiero estar perdida y, como además llevo encima la desconfianza latina, es muy común que desoiga sus indicaciones y continúe en dirección aleatoria a la búsqueda de un lugar que está justo en dirección contraria.
Ya casi me voy, me quedan horitas para descubrir que mi gata se ha enfadado conmigo, que mi marido pasa de mi regalo, que mi hijo no cree que he acertado con el suyo, que el césped se ha puesto amarillo y las orquídeas cabizbajas, que llegaron cartas, multas facturas...es de comprender,añadiendo las horitas de vuelo,que mi ,animo esté revuelto.

martes, 7 de julio de 2009

Los tobillos


En NY los tobillos doloridos duelen más, los parques están hechos de tan insidiosa manera que el Norte parece haberse ido al Oeste, el Oeste al Sur y así so on. Central Park empacha de tanto verde, de tanto idílico paisaje, de mucamas negras con blanquísimas gemelas en sus espléndidos cochecitos y atléticas, esbeltas y también rubias señoras de la 5ª corriendo como gacelas. Y yo solo quiero salir de aquí... mi tobillo derecho también quiere salir de aquí y, mientras, los caminos se retuercen y, a pesar de la fresca sombra, no paro de acordarme de mi territorio amigo: mi cama.

domingo, 5 de julio de 2009

Flores en Tompkins Square, NYC


Me gustan las flores
Me gusta mi Nikon
Tengo jetlag... pero mi hija me lo va a quitar, obligándome a permanecer despierta hasta que se me haya pasado.