Mañana voy a ver a los legionarios del tercio Gran capitán de Melilla llegar al puerto en barco. En Semana Santa, estos muchachos feromonados, con su tallita de menos de pantalón y sus manguitas partiendo en dos sus bíceps, hacen las delicias de los asistentes.
Pasean a un ritmo endiablado, levantan las piernas a cada paso como si quisieran tirarlas hasta el cielo, tuercen las cabezas a una como muñecos mecánicos sobrealimentados y cantan canciones militares de ritmo recio y tristes letras de melancolía primaria y sentimental. Aseguran ser los novios de la Muerte con sus caras tránsidas de entrega y afán por su Cristo que levantan en volandas, a pulso , con caras sublimadas firmes, recios,temibles...
Les acompaña una cabra-carnero uniformada que desfila muy airosa y yo me siento de pronto elevada a una belicosidad mística , a un ardor patriótico y a una entrega religiosa de tatuajes y jóvenes barbudos muy primarios con guante blanco y traje de campaña.
No está bonito lo de unir religión y ejército pero a mi me divierte e impresiona esa parafernalia de siglos que con todo su primitivismo, sus topicazos , sus madelman guerreros, su cabra militar, su himno sentimental ...me conmueven.
Escucha el himno que tiene lo suyo
http://www.youtube.com/watch?v=T6UlQnZ-71U
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