Meter la pata

Entre mis habilidades está la de hablar , decir lo que pienso con claridad usando mi lógica mas profunda y meter la pata hasta la cintura.
El idioma y los usos nos invitan a merodear, adornar, eludir,rondar las ideas con palabras y formas que no molesten ;pues yo, sin enterarme de los efectos causados, uso una primitiva frontalidad y voy como el toro que sale de toriles,al trapo.
Luego, cuando veo los efectos causados, llega un arrepentimiento doloroso y la seguridad de vivir en una cierta soledad.Para ser considerada mi actitud como pecado, le falta la intencionalidad de causar un daño y para ser redimida y perdonada, mi incapacidad para no repetirlo.
Me prometo ser cauta, politicamente correcta,suave y encantadora, mentirosa si hace falta o silenciosa, pero cuando llega el momento, mi yo silvestre y poco domado, vuelve a repetir una y otra vez el gesto.

Aspiro a llegar a ser una viejecita encantadora y según pasa el tiempo, cada día lo veo mas lejano, conste que no por la edad sino por el encanto.
...recuerdo a mi profesor de filosofía  y a Hume...entonces no entendía de qué hablaban.